HANY ELIAS KHAWAM RABAT- La música como pasión

La ciudad donde nació Hany está construida frente al gran rio padre de Venezuela, el Orinoco.

El niño baja por la calle cercana a su casa, hasta que llega a la orilla del rio, y va dejando que el agua moje sus pies descalzos. La serpiente de agua se extiende por toda la Guayana venezolana. La culebra de agua emite sonidos roncos y profundos de una música ancestral, alcanzan su máxima expresión en el Delta del Orinoco, el territorio ancestral de los indios warao.

El niño acaricia el rio con sus manos y pies; lo escucha desde la visión lúdica de sus cinco años, ya sabe que su destino es cantar. Tiene un pensamiento en la cabeza, su primer amor, una niña que vive cerca de su casa, ambos estudian juntos.

El rio transcurre entre ramales que mojan un extenso humedal dejando un vapor tembloroso que permite observar un paisaje siempre cambiante.

Fueron muchos los episodios de guerra que esta ciudad colonial sufrió hasta convertirse en una inexpugnable fortaleza. Allí, Simón Bolívar decidió realizar el primer congreso de Angostura y renuncio a sus poderes absolutos.

El niño está próximo a cumplir su quinto cumpleaños, y ya canta, en su casa todos tienen buen oído musical.

Por la ciudad han pasado españoles, portugueses, árabes, hindúes, franceses, holandeses y toda clase de aventureros que escucharon la historia de la ciudad de oro, el famoso Dorado inventado por los indios para defenderse de la crueldad de la conquista. Frente al rio, el hotel Bolívar. Se presienten los buques atracando en el puerto.

El niño va con su madre y su hermano de regreso a su casa por el casco histórico de la ciudad. Pasan por la casa de Angostura, el fortín que se levanta frente al rio y la casa de la primera imprenta de Venezuela.

Está apasionado por la música, ya es un joven de doce años, y forma su primer grupo musical, le coloca de nombre Intriga.

El sopor de esta ciudad permite soñar al levantarse. Sus calles de piedra, en el centro, frente a viejos zaguanes y casas, dejan la necesidad de resguardarse de un sol refulgente. Su intensidad sigue derramando un frenesí erótico. Las canciones de Hanny hablan de amor, de pasión, de romance, de una necesidad de encuentro con un ser amado para seguir viviendo, su motivación es el amor. Sus letras son románticas, son melódicas como por ej., Contigo: Perdóname…me enamoré, te di mi corazón y no me equivoqué (…) Tu eres la razón de todo mi universo, contigo al fin del mundo y besarte, bailar contigo y enamorarme (…)

Todavía se habla de los encuentros clandestinos de esclavos y señoras deseosas del éxtasis de los hombres africanos arrancados de sus comunidades para convertirlos en esclavos. Mujeres de casta enamoradas y entregadas en cuerpo y alma a las delicias de un amor reconocido como impuro por no poder demostrar la pureza de sangre en real cédula al Rey de España. Mujeres insumisas devenidas en escritoras de cartas rebeldes dando la libertad a sus esclavos solicitando al rey imperante el permiso para legalizar la unión.

De estas lides y la historia de esta ciudad, a los niños como Hany no se les cuenta mucho en la escuela.

Fueron y son muchas luchas. Ciudad Bolívar y su mercado de olores místicos anunciaba el precio del oro en el mercado, en varios idiomas. Dejaba sentir los olores más penetrantes se podían comprar variadas especies para preparar las comidas árabes e hindús. Muchas familias eran descendientes de la India. Sus ancestros habían llegado de Trinidad a vivir en este lugar de artistas inspirados en el paisaje y el conocimiento indígena. Sus cestas llamadas wapas inspiraron a Jesús Soto el creador de arte cinético, uno de los movimientos artísticos que combinaron el conocimiento indígena con las observaciones sobre la luz y la ciencia que posteriormente asombraron a los franceses.

Hany se vuelve un cantante por su búsqueda y su ímpetu propio que lo lleva a salir de su casa en la continuidad de su carrera musical. Su segundo apellido recuerda a la ciudad de un antiguo reino situado cerca del rio Bu regreg y el océano Atlántico, su linaje materno procede de esos paisajes de Marruecos. Siempre ha estado impactado por las visiones del Orinoco. Se ha vuelto un baladista que cuenta historias de amor en sus canciones. Tiene una voz muy particular, ronca y sensual que atrapa y provoca deseos de amar sin restricciones. Es el mayor de cuatro hermanos, dos hembras y dos varones. Su padre vino de Oriente próximo, del mediterráneo, nació en Siria, murió joven. Hablaba seis idiomas, era economista y trabajaba para empresas trasnacionales. Al llegar a Ciudad Bolívar se enamoró de su madre de origen marroquí. Recuerda que en una ocasión intentaron emigrar hacia Canadá por el trabajo de su padre, pero luego decidieron quedarse.

Este encuentro con Hany transcurre en Xinzo de Limia, en Galicia, en Agora, un emprendimiento iniciado por Sonia Trigo, una mujer de Celanova; su proyecto integra la venta de lencería, cafetería, tetería, y un espacio para exposiciones, masajes y sex shop. Una vez al mes realiza charlas sobre distintos temas que denomina “entre nosotras” en honor a las mujeres y al día internacional de la mujer. No hay televisión, y es posible la conversación tranquila y un poco más profunda. Se puede escribir sin restricciones, hay buena luz y wifi gratis. En una mesa del lugar espera Hany. Lleva sus característicos lentes oscuros y su vestimenta deportiva de amante del rock. Es un baladista, un músico, compone sus propias canciones, y quiere hacer su espacio de grabación, sueña con tener su propia productora. Actualmente vive en Celanova, el sitio al que vino a encontrarse con la que fuera su esposa y su hija, a quien desea ver crecer. Es bastante discreto, muy sencillo y dulce, sonríe, choca los puños en señal de amistad. Nos cuenta las dificultades por las que ha venido pasando, pero también nos dice que no ha parado de escribir y componer.

El comienzo es una conversación entre amigos, y recuerda, recuerda, y ante las preguntas rememora ese movimiento del sopor en la ciudad Bolívar de hoy. Es un territorio de migrantes al cual visita para cantar después de haber atravesado sucesos dolorosos que no quiere recordar, pero están allí en el corazón, igual que se quedó su historia, su casa familiar, y el cuerpo de su padre después de un infarto cuando recién había cumplido los cinco años. Actualmente, su madre, y uno de sus hermanos, el baterista, emigraron a México, y su tío Juan Carlos Rabat, el pianista, vive en Madrid. Como muchas familias venezolanas están dispersas por el mundo, soñando que algún día volverán a encontrarse en Venezuela.

Lo conocimos en Celanova, y allí nos enteramos de que es una de las ciudades de Galicia que tiene más venezolanos, algunos hijos de gallegos, y otros venidos por enlaces. Existe una asociación de venezolanos y algunos negocios con comida tradicional de Venezuela. No es casualidad que haya llegado a vivir en esta ciudad.

Le preguntamos por sus comienzos:

“Recuerdo muchísimo desde niño sentarme con mi guitarra, donde fuese, en la calle, a escribir mis historias de amor, y componer la música de mis canciones. La calle de piedra, la bajada de la catorce, andar descalzo a las orillas del rio Orinoco.

A los once años hice una agrupación musical cuyo nombre era Intriga. Esa palabra me gustaba. Éramos dos vocalistas, guitarra, bajo, batería, y teclado. ensayábamos en nuestra casa familiar. A esa edad ya tocábamos en Ciudad Bolívar. Éramos los chicos de la ciudad. Actuábamos como teloneros, acompañábamos los conciertos de Ricardo Montaner y Franco de Evita, dos cantantes venezolanos de bastante fama y trayectoria en ese momento.

Tenía 13 años, y ya actuábamos en el club Ítalo Venezolano, en el malecón, frente al río Orinoco. Tocábamos en el café Traviata. Nos escuchaba gente de la radio Princesa con la canción: “Al fin, antes que termine el sueño”.

Estudiamos en el colegio María Montesori, colegio Santa Marta, y en el Blade Pascal.

Hany parece no querer recordar muchas cosas y hace énfasis en su carrera musical: lo primero para mí siempre ha sido mi carrera musical, a los quince años me gradué de bachiller. Mi madre siempre nos apoyó en la música, montábamos en el carro, o como se dice aquí, en el coche, la batería, los instrumentos, y nos íbamos a tocar donde fuera. Ella conducía, fue nuestra primera mánager.

Cuando me di cuenta de que ya había tocado en todas partes en ciudad Bolívar y ya no había ningún otro lugar nuevo, me fui a Caracas, era 1997. Llegué a casa de uno de mis tíos que vivían en Caracas, eran hermanos de mi mamá. Empecé a ser extra en Radio Caracas TV, y en Venevisión, dos televisoras venezolanas de la época, muy conocidas. Estuve en programas de TV y daba clases de guitarra para sobrevivir. Prácticamente dormía bajo los sellos de las disqueras. Yo tenía un sueño, una ilusión. Estaba seguro de mis canciones, y de mi talento. Una de esas veces me vio el mánager de Ricardo Montaner, y me dio una cita. En esa época viajé en autobús, desde ciudad Bolívar a Caracas, llegué a su oficina, el día que me dijo, pero no me recibió nunca. Seguí adelante, tenía mucha convicción.

Fui a registrar mis canciones. Me iba al metro con una carpeta llena de canciones y cantaba, hasta que tuve mi primer mánager. Toque en muchos sitios e iba de gira por el interior, pero mi sueldo apenas si me alcanzaba para vivir. Actúe en un programa musical de Radio Carcas Televisión que se llamaba “Fama sudor y lágrimas”. La proyección fue grande, empezaron a verme muchos representantes y artistas, y firme con uno de ellos en el año 2006, en el 2005, ya había hecho mi primer disco para la calle. Hany Kauwam del cual se vendieron 50.000 copias. Hice el tema de la telenovela, Mi prima cuela, y se colò en muchos hogares venezolanos, “Es tu amor.” Sonaba así: “Es tu amor que me hace revivir. /Es tu amor que me enseña a ser feliz. /Que me ayuda a vivir y a no morir. /Es tu amor que me enseña a caminar (…)

Mi primer mánager fue Alberto Kawham, ambos tuvimos problemas, firmaba muchos contratos, y yo tenía que trabajar de gira por todo el país, pero apenas si me alcanzaba para vivir. Así que me desligué de él, pero me demando y eso trajo como consecuencia que estuve un tiempo sin poder cantar.

Su segunda producción discográfica fue: “en todas partes”, bajo la producción de Yasmil Marrufo.

Gana diversos premios y el año 2007, es reconocido como el artista que logra reactivar la producción discográfica en Venezuela, así mismo, ocupa el primer puesto delos primeros diez artistas de la clasificación realizada por el Record Report, cuatro de sus títulos figuran dentro de los diez primeros lugares del Top 100 en Venezuela.

En 2012, después de sucesos muy impactantes para mí y para mi familia, me contacto el presidente Chávez, y me pidió que le hiciera el tema de su campaña, y compuse: “Chávez corazón del pueblo”.

Yo he seguido y seguiré cantando mis canciones por todas partes es lo que me hace vivir. Tengo muchos recuerdos de cosas muy bonitas que sigo viviendo, encontrarme con mi gente en los conciertos, en Carnaval y en Semana Santa, en Caracas, La Guaira. Ahora estoy haciendo canciones nuevas.

Yo soy feliz cantando, así sea en sitios pequeñitos. Soy feliz con lo que hago. No necesariamente tengo que cantar para mucha gente. Yo cantando en los bares sería el hombre más feliz del mundo.

Ahora vivo en Celanova, voy y vengo. Subo por el terminal de autobuses, llego a las cascaditas, me voy solo por la rua do muiño, y escribo, todos los días escribo, y canto. Visito a mi hija, la llevo a comer helados, estoy pendiente de ella, aquí he encontrado nuevas amistades.

Nos gustaría saber más de su vida, de su mundo y especialmente de sus canciones con letras sencillas que nos llevan al amor, siempre a un amor musical, de esperanzas, de búsqueda de encuentros, de pareja, de erotismo, de sensualidad. Nos da la impresión de que para Hany su pasión es un amor hecho canción, con el cual atardecer, anochecer, amanecer en lugares y sitios distintos.

Mientras escribimos esta nota sobre su vida escuchamos algunas de sus canciones que podemos encontrar en youtube: Te amo más que a mi vida, la mujer perfecta, contigo, mis lágrimas, es tu amor (…)

¿A quién no le gustaría que le cantaran al oído?

Estoy a un paso de tu vida y de tu corazón/ tan solo dime como hacer para vivir sin ti/ porque sin ti nada es igual/.

A quien no le gustaría olvidar las guerras, los conflictos, las dudas y bailar, bailar, bailar en la luz de una playa caribeña, entre palmeras, y sueños comunes que terminen en estrellas y soles que explotan dentro, muy dentro, generando el placer erótico por la vida y su creación incesante, porque, dice Hany mientras camina solitario por la playa: sin tu amor no valgo nada/ me he dado cuenta que tu amor me da la vida, me he dado cuenta que tu amor no se me olvida, cada detalle/cada gesto, cada risa (…) /Te amo y no puedo evitar lo que siento(…) Me siento perdido/ Es que sin tu amor no valgo nada (…)

Les recomiendo que no dejen de escuchar por YouTube, Donde yo nací, cantada por Hany Kauwam y los Cadillacs, una declaración de amor a la belleza de Venezuela, sus paisajes y la alegría de su gente. Que bello el país donde yo nací. Venezuela, Venezuela, Venezuela. Tu. Siempre adelante y sin temor a nada. Tu me enseñaste a ver con tu alegría, que luchar vale la pena cada día. Y con orgullo decir que el país más bello del mundo es donde yo nací (…)

Es un derroche de alegría y ritmo suavecito para bailar, y cantar sabroso, y en compañía de amigos. Venezuela, Venezuela, Venezuela, donde yo nací…

Su convicción en su música, en su obra y en Venezuela, sin duda, nos hace pensar que va a triunfar más allá de sus fronteras.

R.M.T.B.